domingo, 2 de junio de 2019

VIAJE AL OLVIDO


Caminando hacia el olvido encontré
cientos de mañanas sin ruido
Un manantial profundo
de acantilados
cascadas
recuerdos sentados en los parques
observando cómo juegan ciertas alegrías
ajenas.

Recuerdos sonrientes
engullendo el nudo existencial
que en una garganta
trata de explotar.

Nudos de lágrimas que florecen en un invierno tardío.
Un dolor insostenible,
una tristeza que llora
si se encuentra su reflejo
en cualquier espejo.

Dentro de mí recorren el aire cien luciérnagas
tristes
que iluminan más que las demás.
Juguetean, se posan, me llaman por mi nombre
y yo no puedo parar de mirar.

Cazar con mis dedos los polvos mágicos
que en sus alas luchan contra toda esta gravedad
inhóspita
en la que me siento a reposar.

Recuerdos sonrientes
esperando a que una mente oscura alcance iluminar.
Una bombilla traviesa
correteando.
Una excusa
cualquiera
para actuar.

Vueltas en la cama
impulsos en mis venas
y un intento
dos
tres
de no morir lento.

Yo caminaba hacia el olvido
yo miraba a través de la ventana
cuando la vi explotar,
Llegó sonriendo
llegó sin avisar.

Vueltas en la cama
sábanas mojadas,
deseos
casi olvidados.

Vuelo entre los muros que me vieron pasear
siguiendo una senda de diminutas piedras
colocadas al azar.

Me hundo, me ahogo
me busco en un infierno personal.
Me encuentro sentada en una jaula
mirando a través de una ventana
con las llaves en la mano
y sin voluntad para actuar.

Y la vi explotar.

Una montaña de emociones censuradas
avanza por el camino hacia el olvido
y tú no puedes dejar de observar,
tomar su mano
beber de su boca
dejarte embaucar por sus sombras.

Sigo su “ven” desde que la alcancé.
Un vaivén de sueños atados a sus pies.
Una cárcel donde cualquiera
desearía permanecer.

Sigo su “ven”.
Camino chutando desiertos
leyendo penas enjauladas en una mente
atrapada en el ayer.

Vueltas en la cama,
Beber de un vaso medio lleno
del que sólo veo un precipicio
tentador
por el que saltaré.

Sueño alas espaciales
Universos idílicos de felicidades
y tormentas.

Noches de placer
Orgasmos de espiritualidad
orgasmos con lágrimas
sensaciones flotantes en una nebulosa
interespacial
por la que el deseo es navegar.

Desátame ya
mi deseo es volar
siento no poder ver más allá de este mar.

Siento gritos quebradores
ruidos estridentes que me dejan
sin piedad.

Desátame ya
permíteme correrte
devorarte
Utilizar mis garras para pelear
siendo cómplice
y no una asesina emocional.

Mis garras para trepar
y alcanzar montañas infinitas
que no me empujen a caer después.

Sueño alas de creatividad
acuarelas de colores sin dirección
que se expanden por un papel
vacío de realidad.
Mezclar destinos improbables
de los que nacen
coincidencias llenas de verdad.

Caminando hacia el olvido encontré
cientos de mañanas sin ruido
un manantial profundo de acantilados
cascadas
y un final
a punto de empezar.